El pago de bienes y servicios con criptomonedas se ha venido estandarizando en el mundo y cada vez son más las personas que utilizan sus wallets para cancelar las compras. En Venezuela, a pesar de la crisis por la que atraviesa, el dinero digital se ha convertido en una forma segura para realizar transacciones. Incluso, es posible pagar la gasolina con criptomonedas. El país suramericano tiene las reservas de petróleo certificadas más grandes del mundo, y eso le permitía a la población disfrutar de un subsidio con respecto al precio de la gasolina. De hecho, era la más barata del mundo hasta mayo de 2020, cuando se implementó un nuevo esquema de precios y de suministro de combustible.
A partir de ese mes, la venta de gasolina se comenzó a hacer bajo dos modalidades. La primera es a “precio subsidiado”, como lo ha denominado el gobierno de Venezuela. En este caso, el litro cuesta 5 mil bolívares (moneda local) el litro o 0,01 centavos de dólar estadounidense a la tasa oficial del Banco Central de Venezuela, pero la compra de combustible es limitada a 120 litros por mes. La segunda es a “precio internacional”, el litro cuesta 0,50 centavos de dólar.
Debido a la hiperinflación y al poco flujo de dinero en efectivo, las autoridades venezolanas decidieron utilizar como métodos de pago del combustible tarjetas de débito y crédito, emitidas por las instituciones bancarias nacionales, dólares en efectivo y criptomonedas, específicamente el Petro, el cual fue creado por el propio gobierno en 2017 y que, según su White Paper, se encuentra respaldado por petróleo, oro y diamantes.
Para poder pagar la gasolina con petros, los conductores deben estar inscritos en la plataforma “Sistema Patria”, una especie de base de datos que tiene el gobierno venezolano. Luego de registrarse, los ciudadanos tienen que introducir los datos de su wallets o monedero electrónico, el cual es asignado de manera automática, y mediante el sistema de “biopago” del Banco de Venezuela, también del Estado, pueden pagar el combustible con solo colocar su huella dactilar en puntos de venta especiales en cada estación de servicio.
Durante 2019 y en lo que va de 2020, la administración de Nicolás Maduro ha respaldado de manera importante las transacciones en petros. Mediante decreto presidencial, el token fue legalizado como una unidad de cuenta, lo que obliga a todos los órganos y entes del sector público y privado a expresar sus registros contables en moneda local y en petros.
Igualmente, la Superintendencia Nacional de Criptoactivos ha impulsado el uso de criptomonedas y su intercambio. Por lo tanto, los usuarios que poseen Bitcoin, Litecoin, Ethereum, Dash, entre otras, pueden realizar el intercambio por petros a través de casas autorizadas. El mandatario venezolano en múltiples oportunidades ha solicitado redoblar los esfuerzos para que el petro tenga la misma usabilidad para la población que la moneda física.
“Es muy importante la usabilidad, por lo cual podemos facilitarla. Puede ser que haya gente que no tiene esa usabilidad en el teléfono, pero la usabilidad se la podemos dar nosotros con una tarjeta, la tarjeta del Petro”, dijo en una reciente conferencia de prensa.